¿Carrera de velocidad o de resistencia? A veces el éxito nos reta a perseverar y elegir la segunda opción. Son innumerables las historias de personas y empresas que asumieron el valor de la perseverancia y alcanzaron el éxito. Veámoslo en el próximo relato.
Elizabeth: La edad dorada
En la pelÃcula «Elizabeht: La edad dorada», el aventurero Walter Raleigh, narrando su viaje hacia el nuevo mundo, dice a la reina:
«¿Puede imaginar lo que es cruzar un océano? Por semanas no ve nada; sólo el horizonte perfecto y vacÃo. Se vive atado al miedo: miedo a las tormentas, miedo a enfermarse a bordo, miedo a la inmensidad. Debe guardar su miedo en lo profundo de su estómago, estudiar sus cartas, mirar su compás, orar porque haya buen viento; y esperanza, pura sincera y frágil esperanza».
A veces, la ruta hacia el éxito es una larga travesÃa. Al principio no se ven los frutos. Esto suele desalentar a la mayorÃa. Sólo la perseverancia hace la diferencia. Necesitas confiar en tus conocimientos, capacidades y nunca perder la esperanza. Debes recordar que no se trata de una carrera de velocidad sino de resistencia. Lo importante es seguir a adelante hasta alcanzar el éxito.
En su diálogo con la reina Elizabeth, Sir Walter Raleigh agrega:
«Al principio no hay nada más que niebla en el horizonte. Asà que mira, mira. Luego hay una mancha, una sombra lejana en el agua por un dÃa, por otro dÃa. Luego esta se esparce a lo largo en el horizonte tomando forma hasta que al tercer dÃa Ud. mismo se lo cree y se atreve a susurrar la palabra: tierra, tierra, vida, resurrección, la verdadera aventura que viene de esa vasta y desconocida, de esa inmensidad, hacia una nueva vida. Eso, su majestad, es el nuevo mundo».
Jack Canfield, autor de «sopa de pollo para el alma», lo expresa de este modo:
«Imagina que estás conduciendo por la noche. Las luces delanteras sólo iluminan unos 30 o 60 metros y has de ir desde California hasta Nueva York conduciendo de noche, pero lo único que debes hacer es ver los próximos 30 o 60 metros que tienes delante. Asà es cómo la vida suele desplegarse ante nosotros. ConfÃas en que se te desvelen los siguientes 30 o 60 metros y asà sucesivamente se irá desplegando tu vida. Y sin duda te conducirá al destino que hayas elegido. porque asà lo has querido».
Nike: origen humilde
En 1964, Knight y Bill Bowerman, su entrenador de pista y campo en la Universidad de Oregon, constituyeron una compañÃa de calzado deportivo llamada Blue Ribbon Sports, para evocar una imagen de triunfo. Ese año, vendieron 1,300 pares de zapatos de carreras, que llevaban en la cajuela de un auto, para competencias locales. Después en 1972, Blue Ribbon Sports se convirtió en Nike, debiendo su nombre a la diosa mitológica del triunfo. En 1990, las ventas llegaron a 2,000 millones de dólares, y parte del crecimiento fenomenal se debió a la recomendación de Michael Jordan, la mega estrella del baloncesto americano. En el 2008 sus ventas llegaron a 18,600 millones de dólares.
Psicólogo Renzo Benvenuto
rbenvenuto@doctor.com
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