El tema de la separación es central en la experiencia humana ¿Cuanto cuesta decir adiós? ¿Duele la separación? ¿Cuáles son las consecuencias? La pelÃcula del 2014, La Familia Belier, intenta responder estas interrogantes.
Sinopsis
Todos los miembros de la familia Bélier son sordomudos, excepto Paula (Louane Emera), de 16 años. Ella hace de intérprete para sus padres (hablar por teléfono, tratar con el banco, etc.), especialmente en lo que respecta al funcionamiento de la granja familiar.
Paula, alentada por su profesor de música, descubre su talento para el canto, y decide prepararse para la audición del Coro de Radio France, en ParÃs, pero se trata de una elección que la obligará a distanciarse de su familia.
En esta situación, Paula se enfrenta a la incomprensión de sus padres, dudas sobre su vocación musical, el abandono de las responsabilidades para con su familia y su incertidumbre ante la creciente atracción por un chico de su edad.
El conflicto
El dialogo entre Paula y Mathilde, su mejor amiga, plantea el siguiente conflicto:
Mathilde: ¡Es fantástico! (hacer la audición)
Paula: No puedo ir a ParÃs.
Mathilde: Pero, ¿por qué?
Paula: Mis padres...
Mathilde: Basta. Son sordos, no cachorritos. ¿Cómo hacÃan antes de que nacieras? ¿Quieres ir a esa escuela?
Paula: Eso creo.
Mathilde: ¿Crees o estás segura?
Paula: Estoy segura.
Mathilde: Entonces entra en la competencia. Luego verás.
Paula: Si, pero...
Mathilde: Basta, esto es bueno ¿Quieres pasar toda tu vida aquà (en la granja) comiendo queso? Tienes un don ¿No te das cuenta?
La decisión de dejar atrás a su familia significa, en Paula, dar los primeros pasos hacia su vida adulta mientras tanto, su familia muestra desconcierto por la iniciativa. Para ellos el concepto de la música resulta ajeno. Surge el conflicto ¿Me marcho o me quedo? Para resolverlo Paula debe atravesar el proceso de separación/individuación.
Separación/Individuación
Fue inicialmente Margaret Mahler en su libro: El nacimiento psicológico del infante humano, quien describió un complejo proceso de desarrollo llamado separación/individuación entre los 6 a 36 meses de vida. El proceso termina, satisfactoriamente, con la construcción de la propia identidad, con la afirmación de la autonomÃa.
Nataniel Branden en su libro: Respeto hacia uno mismo sostiene, además, que este proceso puede mantenerse durante todo el ciclo biológico humano. En palabras de Branden:
«Asà podemos pensar acerca de separación como el surgimiento y diferenciación de cualquier matriz de respaldo fundamental –sea eso madre, familia, una etapa dada de desarrollo, identificación con un trabajo particular o carrera, un anticuado o innecesario sistema de creencias».
La meta: autonomÃa
La meta del proceso de separación/individuación consiste en alcanzar la autonomia, es decir, la capacidad para la dirección interior, la autorregulación y la auto-responsabilidad.
Los amo pero los dejo
Paula interpreta, en el climax de la pelÃcula, la canción "Je vole" (del músico francés Michel Sardou) que resume el argumento de la cinta:
Queridos padres, me voy
Los amo, pero los dejo.
Ya no tendrán
niños esta noche.
No corro, vuelo.
Entiendan, vuelo.
Sin humo, sin alcohol.
Yo vuelo, vuelo...
Los amo, pero los dejo.
Ya no tendrán
niños esta noche.
No corro, vuelo.
Entiendan, vuelo.
Sin humo, sin alcohol.
Yo vuelo, vuelo...
Es la declaración de autonomÃa de la protagonista. Un paso adelante en el desarrollo psicológico. Paula decidió avanzar en la dirección correcta.
Pueden revisar también el artÃculo: "Toy story 3: La sana despedida" donde mencionamos otras consecuencias saludables de superar proceso separación/individuación.
PUEDES LEER [ Toy Story 3: La Sana Despedida ]
El rol de los padres
La teorÃa del apego en las relaciones familiares predice la dificultad de algunos padres en facilitar el proceso de separación/individuación. Según John Bolwby padres con un "estilo de apego ansioso/inseguro" son dominantes y/o controladores. Esto impone barreras al desarrollo de la autonomÃa en los hijos: ¡se comportan como si los hijos les pertenecieran! Quizás las palabras del escritor Khalil Gibrán arroje algunas luces sobre su tarea:
Vuestros hijos no son hijos vuestros.
Son los hijos y las hijas de la vida, deseosa de sà misma.
Vienen a través vuestro, pero no vienen de vosotros.
Y, aunque están con vosotros, no os pertenecen.
Son los hijos y las hijas de la vida, deseosa de sà misma.
Vienen a través vuestro, pero no vienen de vosotros.
Y, aunque están con vosotros, no os pertenecen.
Psicólogo Renzo Benvenuto
rbenvenuto@doctor.com
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