Forrest Gump: Retrato del Optimismo

Forrest Gump (1994), película cómico-dramática, esta basada en la novela homónima de Winston Groom. Protagonizada por Tom Hanks, la película es una canción al optimismo. Veamos que hacen diferente las personas optimistas como Forrest Gump.

Sinopsis

Forrest Gump (Tom Hanks) sufre desde pequeño un cierto retraso mental. A pesar de todo, gracias a su tenacidad y a su buen corazón será protagonista de acontecimientos cruciales de su país durante varias décadas. Forrest se une al ejército en Vietnam, encuentra nuevos amigos llamados Dan y Bubba, gana medallas, crea una famosa flota de pesca de gambas, inspira a la gente a correr, da inicio a la moda del ping-pong, crea pegatinas divertidas y escribe canciones, hace donaciones a la gente y se ve con el Presidente más de una vez.

Salvar el día

Forrest siempre ve el vaso medio lleno. Para Forrest, hasta un tiro en las nalgas se convierte en la excusa perfecta para comer helados. Igualmente, nosotros podemos elegir ser optimistas o pesimistas cada día. Si procuramos lo positivo, probablemente seamos más felices y obtengamos más de la vida; ¿por qué buscar lo negativo y ser infeliz? Incluso cuando lo peor suceda, tenemos la alternativa de elegir ser positivo o negativo. 

«Haz lo mejor que puedas con lo que Dios te ha dado» -Forrest Gump

El gurú

Según el Dr. Martin Seligman, gurú del optimismo: "Los optimistas, que enfrentan los mismos reveses en este mundo, piensan de la desgracia en forma opuesta. Tienden a creer que la derrota es sólo un revés temporal o un desafío, y que sus efectos se limitan solamente a ese caso". Al parecer, esta es la virtud de Forrest.

Además los optimistas hacen las cosas de manera diferente...

1. Son personas que interpretan la adversidad como algo pasajero.

2. Aceptan pero no se resignan. Al contrario, buscan alternativas posibles.

3. Logran disociar y no generalizan: un problema en cierto aspecto de la vida no tiene por qué trasladarse a otro. Por ejemplo, una dificultad en el trabajo no invadirá la armonía familiar, o viceversa.

4. No personalizan ni asumen como propia la adversidad. Los optimistas pueden identificar si hay factores externos que causan una situación adversa o un problema.

5. Identifican y trabajan sobre los aspectos personales que pueden limitar o imposibilitar un resultado.

6. Desarrollan conductas saludables para enfrentar los malos momentos.

En cambio los pesimistas están llenos de negatividad...

1. Son personas que tienden a resaltar lo negativo, lo que falta, lo que es insatisfactorio.

2. Suelen tener la percepción de que el futuro es desalentador ("nada bueno me va a pasar").

3. Por lo general creen que las situaciones malas durarán siempre o por un largo tiempo ("estoy condenado a ...").

4. Suelen impregnar o contagiar esa visión a los diferentes ámbitos de su vida (trabajo, pareja, familia).

5. Suelen culparse a sí mismos por los eventos negativos o atribuirse la causa de la desdicha en factores sobre los cuales, en realidad, no pueden incidir.

Cierto relato de Diógenes, el sabio griego, afirma que, a plena luz del día, apareció en una plaza de Atenas, portando una lámpara de aceite mientras decía: «Busco a un hombre honesto.» Quizás debieramos buscar hoy individuos optimistas.

Psicólogo Renzo Benvenuto
rbenvenuto@doctor.com