La actriz Cameron Díaz declaró: «No me importa lucir mayor pues estoy contenta como soy y como se ve mi cuerpo». Según el «Herald Sun», Cameron, en sus 40, afirma no preocuparle la opinión de la gente.
«Prefiero mi apariencia actual y no como estaba en el 2000» año de la película Los Ángeles de Charlie. Además: «Cuando estas en los 40 no tienes la ambición de interpretar papeles de sex symbol»
Estas actitudes positivas muestran una sana autoestima. La actriz advirtió sobre las comparaciones: «Las mujeres tenemos el hábito de hacer comparaciones dañinas...he leído que las comparaciones son un brutal insulto contra si mismo» También dijo: «Hacemos comparaciones porque en el fondo creemos no tener lo suficiente»
El juego de las comparaciones
En Perú, una marca cosmética lanzó un spot televisivo donde 3 mujeres hacían comparaciones al ver modelos más atractivas. Esta publicidad es ilustrativa del juego de las comparaciones:
Todas las mujeres quieren algo que no tienen...
- Mujer A: «Quisiera tener su cabello»
- Mujer B: «¡Que regia! Quisiera ser más alta»
- Mujer C: «Que joven se ve ¿Sera menor que yo?
Estos «hábitos inocentes» pueden ser dañinos para la autoestima.- Mujer A: «Quisiera tener su cabello»
- Mujer B: «¡Que regia! Quisiera ser más alta»
- Mujer C: «Que joven se ve ¿Sera menor que yo?
Hábito nocivo
Las comparaciones tienen efectos dañinos en la autoestima. Este hábito, a veces, te ayuda a sentirte valioso cuando sales vencedor, pero la mayoría del tiempo, saldrás derrotado al compararte con personas de "mejores atributos".
Sentirse valioso
Sentirse valioso es una necesidad universal. Sin embargo, las personas con baja autoestima, tienen una necesidad patológica de probar su valor. Un camino equivocado es hacer comparaciones sobre inteligencia, belleza, dinero, etc.
No estoy tan mal después de todo
Este hábito nocivo se mantiene pues a veces te ves triunfador al hacer comparaciones. En la película X-Men del año 2000, una escena entre Rogue y Wolverine así lo indica:
Rogue se refugia en remolque de Wolverine y al verlo sucio comenta:
- Mi vida no está tan mal después de todo.
- Si prefieres la calle... Responde Wolverine
- No. Se ve muy bien...se ve acogedor.
La receta- Mi vida no está tan mal después de todo.
- Si prefieres la calle... Responde Wolverine
- No. Se ve muy bien...se ve acogedor.
Si hasta ahora tu estrategia para sentirte valioso ha sido compararte con los demás, una forma saludable consiste en apreciarte a ti mismo. Es decir, valorar los atributos positivos que posees. Es mejor concentrarse en lo que tienes que lamentarse por cualidades o logros ajenos. Tal como Cameron Díaz recomienda: «Debemos amar nuestros cuerpos, comprender sus necesidades de alimentación y no preocuparnos o juzgarnos a nosotros mismos en comparación con los demás»
La receta de Cameron se resume en la frase: «Estoy contenta como soy» según declaro al «Herald Sun».
Psicólogo Renzo Benvenuto
rbenvenuto@doctor.com
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